sábado, 9 de marzo de 2013

Él

"Felicidad" 


Me pidieron que escribiese algo alegre... ¿Y qué mejor para ello que escribir sobre lo que consigue que te sientas así?
Como las tardes de viernes, las noches de sábado, el cine con su olor a palomitas, las películas de Tim Burton (protagonizadas por Johnny Depp), la música... Música sin descanso, una buena novela, los días en familia, las risas en clase, las risas cuando deberíamos estar en clase, el chocolate, el infinito...
Pero sobre todo, él, el que me enseña música nueva (o al menos eso intento que haga), el que consigue que me vicie a cosas que nunca creía que lo haría, el que (casi) siempre me hace esperar cuando quedo con el, el que me hace reir y en ocasiones se ríe de mi, el que consigue que sonría cuando es lo último que me apetece hacer, el que se marcha a inglaterra un año, pero sé que aún así seguirá estando ahí, por el que a veces decae mi ánimo, porque no todo puede ser de color de rosa, con el que hago planes para el futuro, el que me hace feliz.
Pase lo que pase el siempre será alguien importante para mí.




miércoles, 6 de marzo de 2013

Enero



“Si es cuestión de confesar”


Enero y su año nuevo han quedado ya un poco atrás. Al igual que todas esas promesas que te haces a ti mismo cuando dan las doce campanadas: “Me pondré en forma”, “estudiaré mucho más duro”, “me esforzaré más en el trabajo, “,dejaré de fumar”…
Promesas que te haces a ti mismo con la esperanza de que el año que entra sea un poco mejor que el anterior, te convences de que “que pase lo que pase no dejarás que nada te pare” porque “este es tu año”, porque “esta vez es diferente a las anteriores”.
Luego llega Marzo, con sus (todavía) días fríos, sus ganas de semana Santa y la misma rutina. Y un buen día,  te paras a reflexionar sobre todas esas promesas y pensamientos que tenías, y te das cuenta de que sigues siendo la misma persona que el 31 de Diciembre, con los mismos fallos, los mismos vicios y la misma lista de promesas pendientes de cumplir. 

"Porque lo último que perdemos es la esperanza"

martes, 5 de marzo de 2013

A lo lejos.



“No pido nada más que estar entre tus brazos”


Y ahí estaba ella, sublime, inalcanzable, rodeada por una cierta aura similar a la que el imaginaba que tendrían los ángeles. Pero... ¿era real, o solo era una ilusión de su enfermiza cabeza delirando  de amor?
Amor… Sí, amor, amor por ella, por sus ojos verdes, por su pelo azabache, por el ligero perfume que desprendía a cada paso que daba.
El la amaba, la amaba con cada pedazo de su corazón y con cada pedazo de su alma. Aparecía en cada poema que escribía, en cada canción que componía, en cada cuadro que pintaba, era su musa, su inspiración, su anhelo. Ella era arte para él.
Y así pasaba sus días, mirando desde lejos como vendía su amor a hombres apuestos que después la destrozaban el corazón, esperando, que algún día, sus sueños se hicieran realidad y pudiera hacer realmente feliz a su musa querida…